El cáncer de ovario es una de las principales causas de muerte en la mujer a nivel mundial, en este sentido, la matrona Janice Reyes sostiene que una detección precoz y oportuna, mejora las expectativas de vida de quien lo padece.
La especialista, destaca que el chequeo ginecológico anual es la herramienta más efectiva para detectar esta enfermedad en una fase temprana, dado que en este punto, el cáncer no genera síntomas.
De hecho los síntomas (que generalmente surgen en una etapa más avanzada), son poco claros y por lo general retrasan el diagnóstico porque no se asocian al aparato reproductor sino más bien a molestias gastrointestinales.
Los síntomas pueden ser:
- Inflamación abdominal
- Pérdida de peso
- Molestias en la pelvis
- Estreñimiento o diarrea
- Frecuentes ganas de orinar
- Nauseas
- fatiga
La edad es un importante factor de riesgo para desarrollar este tipo de cáncer que se presenta comúnmente en mujeres mayores de 50 años, por lo que es importante continuar la evaluación ginecológica incluso después de la menopausia.
Otro factor de riesgo para esta patología son los antecedentes familiares, en este caso se debe prestar mayor atención a la evaluación ginecológica.